De bodas y bodorrios

Bueno, esta semana es la boda de P. El viernes para ser más exactos... Es curioso lo de P. y mío. Es mi inestimable compañera de trabajo... Pero lo mejor de todo es que también fuimos compañeras de universidad (aunque sólo coincidiéramos en un par de asignaturas, en una de las cuales hicimos un trabajo juntas), y por cosas de la vida hemos acabado trabajando juntas en dos (2!!!!!) sitios. A veces me cuesta referirme a ella. No sé muy bien si decir: P, mi compañera de trabajo, o P., mi amiga que es tb compañera de trabajo... Me parece que me quedo con lo segundo... jejeje.

Pues nada, que ya está todo organizado. He vivido la preparación de esta boda como si fuera la mía... Alquilar la masía, contratar un catering, hablar con el cura (bueno, yo no... ella!!!), hacer las invitaciones, pensar en los detalles para los invitados, ver el video que han preparado especialmente para la ocasión (banda sonora de The Cure, eh Wishhhhh????), decidir destino del viaje de novios... Eh, que todo esto no lo he decidido yo, pero he sido debidamente consultada. Me sentía como en esa peli de una tía que organiza bodas para los demás...

Y nada, que ya sólo quedan unos días y la tengo aquí delante histérica con las últimas cosas que le quedan... A mí, personalmente, sólo me falta ir a recoger mi vestido, pero igualmente estoy algo nerviosa... Qué facilidad de ponerme en la piel de los demás!!!

Pues nada... q mañana estaré por los Madriles... esto es un aviso a aquellos que les gustan mis peripecias viajeras. Espero que no pase nadaaaaaaaaaa...