Viernes... mon amour!

Buenooooo... que ya está aquí el fin de semana!! Por favor, qué ganas de que pase ya de una puñetera vez el viernes... y sólo estamos a las 2 del mediodía...

Pongámonos en situación: la calefacción está a 40 grados mínimo, llevo un jersey de invierno, tengo mucho calor, mi jefe se ha ido (donde??? es un misterio...), mi compañera está aqui enfrente haciendo ruiditos con el ordenador (jajajaja), los vecinos del 8 (cuando pase todo ya explicaré quien son, no vaya a ser q por aquí corra algun medico) no paran de dar el coñazo y son bastante bordes / prepotentes. Este es mi situación ambiental actual...

Hoy toca revisión de la vista... Ya hace dos meses y pico que me operé... cómo pasa el tiempo, señores!!! Estoy por llamar al médico y decirle: veo bien, no tengo molestias ni nada... ¿Puedo ahorrarme la visita? En fin, que va a ser q no, y q voy a tener que ir... Dios, qué perezaaaaa! (los del 8 en estos momentos están chillando, un momento, que voy a quejarme a recepción...) (...). Ya está...

Este fin de semana tengo ganas de desconectar, la verdad es que ha sido una semana bastante caótica. He tenido muchísimo trabajo y mi cabeza no estaba muy centrada en él, así que si juntamos mucho trabajo y muy pocas ganas de hacerlo sale un cocktail casi explosivo y nada productivo (desde el punto de vista empresarial, claro...). Pero bueno, la semana laboral únicamente tiene 5 dias y por suerte ya estamos en el 5º... motivante, eh???

Hoy, no sé por qué me he acordado de otra de las anécdotas acontecidas en Bélgica, así que os la relato:
"Andábamos las 3 floretes camino del hostal nada más llegar a Bruselas (si, si... el hostal del compañero francés que cantaba la marsellesa) en un bus subidas con las maletas con nosotras y un frío de narices. En un giro algo pronunciado el bus roza un coche que tb intentaba girar. Nosotras que íbamos atrás del todo vemos lo acontecido pr callamos, porque el conductor no se dio cuenta. De repente del coche salta un tio y empieza a correr siguiendo al autobus... era el copiloto del coche... Pero corriendo como un energúmeno!! Mis caras, que por norma general son la pura expresión de mis emociones (es lo que tiene no saber muy bien cómo expresarlas con palabras jeje) debian ser un poema... El tio llega a la altura del bus y empieza a aporrear la puerta, el bus para, abre la puerta y ale, a discutir en francés... ole ole ole... Total, al final llegan a un acuerdo y se va cada uno por su lado... como si nada hubiera pasado! Yo flipé como la que más..."

Fin de la anécdota... y fin del post de este caluroso viernes... Me voy a comer, que hay hambre...

Bon cap de setmana!!!